El presente artículo de investigación, enmarcado en el patrimonio cultural, tiene como propósito el análisis crítico del discurso de un Decreto del gobierno del estado Nueva Esparta, ejecutado el 12 de diciembre de 1915, vinculado con la población de El Tirano, donde se decreta la construcción de la plaza Bolívar. Tal Decreto es previo a otro publicado nueve (9) días después, donde se elimina su nombre y se le designa como Puerto Fermín. El decreto analizado es clave para comprender el contexto que contribuyó para que esta población perdiera días después su toponimia, con la consecuente afectación de su identidad cultural. Previo al análisis se abordan aspectos teóricos respecto al patrimonio cultural, orígenes toponímicos de El Tirano, la utilidad del término “desheredad cultural” aplicable a este análisis, así como un breve abordaje de su topónimo Lope de Aguirre, citado por algunos autores interesados en el imaginario construido en el tiempo alrededor de él, entre ellos, el reconocido novelista venezolano Miguel Otero Silva. En tal decreto gubernamental se evidencia la polarización negativa de la representación social internalizada en los jerarcas gomecistas de la época respecto a Lope de Aguirre, expresada en la apropiación negativa contenida en su retórica discursiva, la cual propicia finalmente la desheredad cultural de El Tirano. Palabras clave: Toponimia, El Tirano, Análisis Crítico del Discurso, Decretos, Desheredad Cultural.